sábado, 6 de abril de 2013

Por qué te quiero en 425 palabras.


Te quiero porque en menos de dos semanas ya te escribía por las noches.
Te quiero porque entiendes mis miedos, los escuchas, y luego los acaricias. Y en vez de espantarlos, dejas que se duerman en tu hombro, y esperas a que mueran solos, o mejor, a que dejen de atacarme por las noches. Y si reaparecen en pesadillas me agarras la mano, y me dices que todo está bien. Que todo va a salir bien.
Te quiero porque me pides que sonría. Y porque lo que no sabes es que mi sonrisa sólo sabe sonreír por ti.
Te quiero porque eres la mejor almohada que jamás he tenido, y teniendo en cuenta lo que me gusta dormir… Y más ahora, que te sueño. Que puedo soñarte sabiéndote. Porque yo llevo media vida soñando contigo, Amor. Pero ahora ya no eres sólo sueño. Ahora eres el lado derecho de mi cama. Y créeme que después de besarte, cualquier verso es escaso. Me refiero a tus be(r)sos, que siempre van a parecerme escasos desde aquél nueve.
Te quiero porque desde que te conozco la vida no me asusta (tanto) y porque apostaste tu todo por mí, y así es imposible no querer tirarse de cabeza y sin salvavidas a tu mar.
Te quiero porque aguantas y esperas… y ME esperas.
Te quiero porque estoy hecha para quererte y besarte los costados y abrazarte por la espalda.
Te quiero porque me siento a salvo contigo mientras me siento presa de ti a la vez que libre.
Te quiero porque cantas conmigo mis canciones favoritas. Y me cocinas. Y me traes el desayuno a la cama, y las sonrisas con triple de azúcar.
Te quiero porque tu sonrisa es lo más bonito que veré en vida. Y porque me perdería cualquier atardecer naranja del mundo por verte amanecer.
Te quiero porque no hay mejor sábana que tu abrazo, ni mejor colchón que tu cuerpo. Como tampoco existe mejor calefacción que el calor que desprende tu piel.
Te quiero porque me has besado las lágrimas… varias veces… y… pues eso.
Te quiero porque Amor y tu nombre empiezan por la misma letra, y eso no puede ser casualidad.
Pero sobre todo, te quiero porque te he presentado a mis fantasmas y en vez de girarte, les has sonreído a los ojos y después me has mirado y me has susurrado el “te quiero” más sincero que jamás volveré a escuchar.

Te escribí a las dos semanas de conocerte.
Te versé.
Lo siento, Amor, la poesía me ordena quererte.





Mi fea voz recitándolo aquí.

11 comentarios:

  1. Precioso.
    Me quedo con la parte que dice "Y porque me perdería cualquier atardecer naranja del mundo por verte amanecer." y con ese final.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Vaya, se ha publicado con mi antigua cuenta.

      Eliminar
    2. Muchísimas gracias. Supongo que es una pérdida con infinitas ganancias :)

      Eliminar
  2. Supongo que a ti la poesía te ordena que le quieras, y a mí la vida me ordena que me enamore de ti.

    ResponderEliminar
  3. BRAVO. M de Magia, Marta.

    ResponderEliminar
  4. Vaya cosa más bonita... Me ha encantado de verdad

    ResponderEliminar
  5. ¿Qué tienes 15 años?
    Por favor, tráeme una B de balde que me entran ganas de vomitar tus versos; qué casualidad que vomitar y versos empiecen las dos con la misma letra. Se te ha olvidado la parte de que le quieres porque desde que le conoces no paras de cagar mariposas.

    ResponderEliminar